UN CLARO EJEMPLO DE LA ACTUAL GESTIÓN MUNICIPAL: CONTRATACIÓN FERIA TAURINA CASTELLAR 2013

jueves, 26 de septiembre de 2013

El título del post os dice el tema que vamos a ver en esta entrada y  no quiero empezar fríamente aportando unos datos, contando una serie de cosas y transmitiendo, como en otras ocasiones,  lo que comprobamos algunas veces cuando recabamos una información y vamos al Ayuntamiento a que nos la faciliten.

            Es verdad que la capacidad de sorpresa la mantenemos intacta porque siempre es una auténtica caja de sorpresas lo que nos podemos encontrar en las dependencias municipales. No sé si es ignorancia, si es mala fe, o si es que falta alguien que dirija lo que el Alcalde no sabe hacer, o es que cada uno va a su bola y, dentro del desastre, la división en el equipo de gobierno hace que se hagan las cosas tan mal como se hacen.

            Os puedo asegurar que nada me gustaría más que poder decir solamente unos datos o unas cifras y no reparar siquiera en el procedimiento seguido, pero conforme avanzan los meses es peor. Es imposible que hagan un solo procedimiento con cierta regularidad y con la normalidad que se supone en estos casos.

            Es verdad que no se podría calificar de ilegal, pero sí de tremendas improvisaciones que no es posible se sigan haciendo una tras otra sin que alguien diga ¡basta! ¿Ni uno solo, pues el alcalde ya sabemos que no, es capaz de decir que “las cosas bien hechas bien parecen” y que, por ejemplo, no se puede contratar una feria taurina de esta manera?

            Todo esto no es más que el reflejo del desastre de gestión que el Ayuntamiento está llevando a cabo. Todo mangas por hombro y sin ningún rigor económico, y no digamos ya si hablamos de lo político o de la ética en este campo.

            Paso sin más a ofreceros los datos y explicaros la situación:

            En mayo de 2012, se dicta una providencia de la alcaldía, anunciando que se van a invertir 18.150€ (IVA incluido) por parte del Ayuntamiento, para la feria taurina de Castellar 2013.

            Mediante un procedimiento negociado sin publicidad, es decir, sin que se publique en el Boletín de la Provincia, (con lo que conlleva que otras empresas taurinas desconozcan la propuesta del Ayuntamiento, salvo aquellas a las que el propio Alcalde o Concejales hubieran llamado), se reciben en el Ayuntamiento tres ofertas de distintas empresas de espectáculos taurinos entre las que, obviamente, se encuentra la que será adjudicataria.

            Cuando esto se hace así, sin publicar un pliego de condiciones previo, sin abrir un concurso público, con plazos y transparencia,  se trata entonces de una adjudicación directa y suele ocurrir que se presentan presupuestos de difícil credibilidad.

           
El procedimiento, como ya dije antes, no es de por sí ilegal, pero sí poco transparente y como, en este caso, con algunas irregularidades, cuando menos.

            La empresa adjudicataria oferta 15.000€ más IVA. Las otras dos ofrecían  23.000€ y 21.000€, respectivamente. Los presupuestos de los festejos de las empresas que no son la adjudicataria estaban más simplificados y peor estructurados, aunque tampoco había gran diferencia en eso.

            El 12 de junio se formaliza contrato oficial con la empresa adjudicataria, por 18.150€ (IVA incluido), en el que la programación que figura es la siguiente:

12 de agosto Gran Prix (3 vacas)
13 de agosto Novillada o festival (6 novillos)
14 de agosto: Festival sin picadores
15 de agosto: Festival sin picadores
07 de septiembre: novillada o festival sin picar.

            Como vemos el 12 de junio ya teníamos el esbozo de una feria con muy pocas concreciones y con una subvención municipal de 18.150€

            Hemos visto que esta empresa había presentado una oferta de 15.000€  (IVA no incluido). Claramente se está jugando con el IVA siempre.

            Todo transcurre así hasta que el 23 de julio, de nuevo las tres empresas anteriores, envían al Ayuntamiento una nueva propuesta. Evidentemente, y al ver esta nueva oferta nos daremos cuenta de que esto no “nace” de las propias empresas, sino que claramente alguien del Equipo de Gobierno o el Alcalde le han pedido una nueva programación.

            Por 18.000€, en este caso sin IVA incluido, la programación propuesta es:

            Día 12, Gran Prix
            Día 13, Novillada sin picar (6 novillos)
            Día 14, Corrida de toros (6 toros)
(Toreros a elegir: El Cordobés, Fandi, Javier Conde, Antonio Ferrera, Lumbrerita, Carnicerito de Úbeda, José C. Venegas, David Mora, David Galván, Finito de Córdoba… etcétera)
            Día 15, Festival taurino sin picadores
            Septiembre: Festival o novillada.

            Tenemos una nueva propuesta, una nueva programación, sin que se sepa, ni se haga ningún otro trámite administrativo y con un contrato en vigor firmado el 12 de junio.

            No será hasta el primer día de la feria, o sea hasta el 12 de agosto, cuando el Alcalde por una Resolución deja sin efecto y anula el contrato anterior. Los carteles, por tanto, estaban en la calle cuando no había contrato firmado, o mejor sí había uno en vigor que nada tenía que ver con los carteles. Los toreros ya estaban elegidos entre todos los enumerados anteriormente.

            Ese mismo día, primer día de la feria taurina se firma un nuevo contrato por 21.780 euros (IVA incluido) y con la programación presupuestada el 23 de julio, con la única variación de que en septiembre serán 5 novillos.

            Pero si ya, quien tenga un mínimo de pudor, estará con las manos en la cabeza, todavía el Alcalde nos reserva una última sorpresa. No debe estar muy seguro de lo del IVA (¡gran ignorancia!) y ese mismo día, 12 de agosto, primer día de fiestas, envía un escrito a la Agencia Tributaria de Villacarrillo consultando sobre el porcentaje de IVA a aplicar y específica el tipo de festejo y el número de reses a lidiar cada día, dando a entender que el porcentaje del IVA va en relación al tipo de espectáculo.  En fin esto ya no tiene desperdicio alguno.

            Solo quiero pediros que reflexionéis un poco y penséis en qué manos está el Ayuntamiento de Castellar cuando se hace una tramitación y un procedimiento administrativo así, de esta manera,  y una programación de este tipo para la feria taurina de nuestro pueblo.

            No entramos, aunque podríamos hacerlo muy extensamente en el desprecio añadido que todo esto supone para la fiesta de los toros y su estado actual. Solo diremos que si algo necesitan los toros ahora, en estos tiempos, es un especial cuidado en todo lo que se haga o se programe,  pensando siempre en su promoción y en el fomento de la afición y de los festejos que son la base de la fiesta en pueblos como el nuestro.


Sobre la forma de cómo se gestiona el dinero público por parte de algún@s políticos, este es un claro ejemplo de que así NO se debe hacer.

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